
Otro de los templos que se habían barajado en un principio es San Antonio, también situado en un punto estratégico (ya que coincide con el final de la carrera oficial). Pero finalmente el Consejo ha descartado la posibilidad porque la puerta supone un difícil obstáculo para muchos pasos.
En todos los templos que finalmente se habiliten como refugios en caso de lluvia deberá haber un responsable que estará permanente localizado para que el interior esté preparado para recibir los cortejos en el momento en el que fuera necesario.